La construcción seguirá cayendo en España hasta 2015, según las últimas previsiones de la Comisión Europea
En este año 2013 sólo crecerá la construcción en cinco países, con Rumanía a la cabeza, donde la inversión crecerá hasta el 3,2%
Comisión Europea y elaboración propia.
Parece ser que, aunque comienza a haber signos positivos de recuperación económica en España a nivel global, sin embargo, la construcción aún tendrá que esperar un par de años para comenzar a registrar datos más optimistas. Al menos así lo constata, en sus últimas previsiones semestrales de primavera hechas públicas a finales de mayo, la Comisión Europea, que estima que el PIB de la UE-27 caerá este año un 0,1%, mientras que el de la zona euro-17 tendrá un mayor retroceso, hasta el -0,6%. En ambos casos sería la menor caída de los últimos cuatro años y un indicativo bastante sólido de que el conjunto de países comunitarios pueden estar enfilando el camino de la recuperación. A pesar de ello, y de los mencionados signos de que se está estabilizando la economía española, la corrección de sus desequilibrios, aún numerosos, sigue siendo un lastre para nuestra demanda interna.
La destrucción de empleo en España seguirá creciendo este año hasta alcanzar incluso el 27% de la población activa y, a pesar de los avances conseguidos como consecuencia de las medidas adoptadas, el déficit público se situará todavía en el 6,5% del PIB. La inversión residencial caerá un 7,7% y la dirigida a otras edificaciones y resto de construcción, que incluye la obra pública, lo hará aún más hasta un -10,3%.
En el período 2005-2012 sólo seis países han aumentado su inversión en construcción en relación a su PIB respectivo. A la cabeza se situó Rumanía, con cerca del 5%. Con mucha menor intensidad también lo han hecho Suecia, Polonia y un poco menos Alemania, Francia y Bélgica. El resto de países ha reducido esta magnitud, destacando la caída de Irlanda, con un poco más del -15%, seguida de España, Grecia, Portugal y Hungría.
Previsiones para 2013
Para este año 2013, la UE pronostica que, en términos reales, sólo crecerá la inversión en construcción en cinco países. De nuevo subraya la pujanza de Rumanía, donde esta inversión crecerá hasta el 3,2%; Eslovaquia y Lituania lo harán en porcentajes similares (1,9% y 1,8% respectivamente); Austria alcanzará un crecimiento del 1,4%, y Alemania del 1%, siendo en cualquier caso crecimientos moderados en relación con los que se producían antes del comienzo de la crisis. El resto de países reducirá su inversión en construcción. Muy levemente, Dinamarca y Reino Unido. Por su parte Suecia, Francia, Finlandia y Luxemburgo lo harán entre un -0,8% y un -1,9%, aún por debajo de la media de la UE-15, que será del -2%.
A partir de ahí, en el resto de países la reducción de su respectiva inversión en construcción en 2013 será mayor que la media. En Bélgica, Irlanda, Hungría e Italia la reducción interanual estará entre un -2,2% y un -3,4%; en la República Checa en un -4,7%, en Grecia en un -5,1%, en Países Bajos en un -6,3% y en Polonia en un -6,8%.
Las mayores reducciones, de nuevo, se registrarán en España con el -9% y Portugal con el -10,5%. Esta caída en términos de inversión en construcción que apunta la UE para España se traduciría en un mayor porcentaje interanual de pérdida de producción, es decir, de actividad, y se compadecería con las previsiones que hace unos meses hacía Seopan, que vaticinaba una caída de esta magnitud en España en el año 2013 de entre el -9% y el -11%.
Para 2014 vaticina la UE una cierta recuperación de la actividad constructora. Once países estarán por encima de la media del total de países de la UE-15, que se situará en un crecimiento del 1,6%. La que más crecerá será Grecia (7%), seguida de Rumanía y Lituania (en torno al 4,8% cada una) y Reino Unido con un 4,4%. Alemania y Eslovaquia crecerían un 2,9% cada una y con menor intensidad, pero siempre en positivo y por encima de la media, estarán Dinamarca, Luxemburgo, Suecia, Austria y Finlandia.
El resto de países comunitarios con la excepción de España, Hungría e Italia, tendrían menor crecimiento. Irlanda tendría crecimiento cero y Hungría retrocedería un -1,2%. España sería el farolillo rojo, con una caída de casi el -2%. Aún hay por medio un largo camino de difícil y duro tránsito hasta que se produzca en España la reactivación del sector de la construcción.
