Construmat arrancó el pasado lunes con un manifiesto donde el sector de la construcción sale en defensa de su futuro
El decálogo de medidas, que cuenta con el apoyo de 100 entidades en representación de más de 500.000 profesionales vinculados a la construcción, se centra en la necesidad de un compromiso global para la reactivación económica. En este sentido, de las entidades financieras se precisa una reactivación del crédito, y de las administraciones, el mantenimiento del nivel inversor en obra pública y la promoción de actuaciones que faciliten el desarrollo de la obra residencial.
El llamado 'Manifiesto Construmat' insta a las administraciones públicas y a las entidades financieras a tomar consciencia de la necesidad de que el crédito se formalice para propiciar la actividad en la edificación y, en especial, en obra nueva. También se recaba la mejora y actualización de las leyes y normas del sector, en general, en el sentido de que son excesivas y generan en ocasiones duplicidades innecesarias. El fomento de la innovación, la promoción internacional, la captación de compradores extranjeros para reducir el stock existente son otras de las medidas. Respecto a esta última, el sector considera que la generalización del stock es un error,puesto que hay zonas de España en las que ya se ha agotado la oferta y se podrían iniciar nuevas promociones de vivienda nueva.
En contrapartida, el sector se compromete a 'concluir el proceso de modernización iniciado, priorizando la creación de puestos de trabajo y de nuevas empresas, la formación de las personas, la eficiencia y sostenibilidad medioambiental y económica del sector de la edificación y la obra civil'.
La inauguración
Construmat 2011 reúne a 1.318 empresas de 28 países que se disponen en 40.000 metros cuadrados del recinto Gran Vía de Fira, y, por primera vez en su historia, abrirá un día sus puertas al público en general (el sábado, 21 de mayo).
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, y la secretaria de Estado de Vivienda, Beatriz Corredor, fueron los encargados de inaugurar el salón.
Corredor, anunció en su intervención que la Ley de Sostenibilidad en el Medio Urbano incluirá una ITV para edificios, de la que se viene hablando desde hace años sin mucha concreción. Será la Inspección Técnica de Edificios (ITE) y la deberán pasar todos los edificios de más de 40 años y con una periodicidad de cada quince. Corredor recordó que la mitad del parque de viviendas español tiene más de 30 años y ha explicado que la ITE también incluirá un informe de eficiencia energética. Por su parte, el presidente de la Generalitat animó a los empresarios de la construcción a salir al extranjero donde, ha dicho, 'hay países que no tienen crisis ninguna'. Mas también recordó que su ejecutivo prepara una 'macro ley' para reducir la burocracia en todos los sectores.
Actividades de Construmat
Entre las actividades que incluye el salón destaca el Primer Foro de Construcción Brasil-España en el que las principales asociaciones sectoriales de Brasil exponen las necesidades que tienen y que la industria española de la construcción puede resolver. El foro se celebra desde el lunes hasta el viernes.
Como en años anteriores, Construmat celebra un concurso albañilería, organizado por el Gremio de Constructores de Barcelona. Este año tiene lugar la decimosexta edición del Concurso Nacional Albañilería, así como la decimosegunda edición del Concurso Internacional de Albañilería. Varias parejas compuestas por un albañil y un peón deberán levantar una pieza en el menor tiempo posible y con los máximos parámetros de calidad. Entre las parejas participantes hay dos que lo hacen en nombre de la Fundación Laboral de la Construcción, una procedente de la Comunidad Valenciana y otra de Cataluña; esta última, además, fue la ganadora del III Concurso de Albañilería celebrado en Construtec el pasado año. El concurso de albañilería de Construmat será el sábado 21 de mayo.
El próximo año, la Fira de Barcelona ha decidido organizar una nueva edición de este salón especializado en el sector de la construcción en Pekín. La iniciativa es fruto del acuerdo conseguido entre Fira de Barcelona y el Consejo Chino de Promoción del Comercial Exterior (Ccpit).
Fuentes informativas: El Mundo, El País y elaboración propia.