Sandra Anglada: “Desde que yo empecé, hace ya 20 años, el sector para las mujeres ha cambiado mucho en positivo”

Uno de los grandes retos que tiene el sector de la construcción es atraer mano de obra cualificada para paliar la falta de relevo generacional. Y eso pasa, sobre todo, por los jóvenes y por las mujeres. La Fundación Laboral de la Construcción presenta, en el marco de la campaña “Esta es mi historia”, lanzada en 2024, una nueva entrega a través de la "historia" de Sandra Anglada, arquitecta técnica de prevención, profesora en la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) y docente en FLC. El objetivo del proyecto: dar voz a las experiencias en primera persona de mujeres del sector que sirva de referente e inspiración para las futuras profesionales de la construcción. 

Pregunta.- ¿Cómo llegas al sector de la construcción? ¿Qué es lo que te motiva? 

Respuesta.- Pues la verdad es que llegué por curiosidad pura. En mi familia tengo muchos tíos que se dedican a la construcción, empezando por el hermano mayor de mi padre, conductor de retroexcavadoras, después mi otro tío albañil, otro tío pintor y constructor. El único que no se dedica a la construcción es mi padre, que es empresario en el sector de la metalurgia. Pero claro, yo paseaba, veía una obra, veía el cartel de la constructora de mi tío y le preguntaba, ¿qué estás haciendo? y ¿cómo funciona esto? ¿y el encuentro entre el pilar y la cubierta? Y él veía que yo tenía interés y pues me iban explicando y bueno, fui subiendo así con ese interés de ver que, donde había un descampado, después había un edificio y madres y padres saliendo de ese edificio. Me hacía mucha ilusión formar parte de eso.

P.- De todas las obras en las que has podido participar, ¿de cuál estás especialmente orgullosa? 

R.- Pues estoy especialmente orgullosa de formar parte del equipo que construyó el centro Comercial Arenas en Plaza España y la Terminal 1, porque me encanta. Cada vez que voy al centro comercial a ver una película o a la terminal a coger un avión, ver cómo la gente la usa, entra, sale y hace su vida allí. 

P.- Y tú que estás cerca de de alumnos y alumnas, de los futuros trabajadores del sector de la construcción. ¿Qué es lo que les atrae para decidirse por el sector? 

R.- Aparte del trabajo en equipo, el sector de la construcción yo creo que es también la capacidad de superación, la adaptabilidad; el ser capaz de empatizar con tus compañeros, de trabajar conjuntamente para al final tener un resultado que es un edificio terminado y que ha sido gracias al esfuerzo de todos y cada uno de ellos.

P.- Es un sector que ha evolucionado mucho, pero a lo mejor hace 20 años pues era un poco más complicado. Me contabas alguna anécdota de los inicios. ¿Nos la puedes compartir? 

R.- Tengo que decir que han pasado muchos años. Las cosas han cambiado mucho en positivo, pero hace 20 años, cuando yo empecé como mujer joven, en la obra era muy complicado hacerte respetar y más como jefa de obra. Era complicado. Con los años ha ido evolucionando y es más, actualmente te puedo decir que en algunos puestos de trabajo hay muchísimas mujeres, porque los directores están buscando precisamente para esos puestos de trabajo personas con una gran actitud, indiferentemente sean hombres o mujeres, color o religión, hay cosas que han pasado a un segundo término y eso es muy bueno porque damos oportunidades realmente por las aptitudes y la actitud de las personas. 

P.-  ¿Y cuáles son esas actitudes y aptitudes que hay que tener para trabajar en el sector?

R.- Mucha empatía porque no vas a trabajar solo, vas a trabajar con un equipo de personas, con lo cual tienes que empatizar para poder conectar con esas personas. Mucha audacia, esfuerzo y, sobre todo, constancia. Con constancia se llega a todas partes. 

P.-  Te brillan los ojos cuando hablas de este sector, ¿te ves en él toda tu vida?

R.- Sí, sí, yo creo que sí. Puede que me desvíe un poquito, pero siempre voy a estar en contacto con este sector. 

P.-  Tu futuro, ¿dónde estarías, Sandra? 

R.- Pues espero que enseñando dentro de diez años, ya sea como profesora directamente o como equipo de formación. Espero no separarme mucho de la enseñanza, es algo que descubrí tarde, porque hice obra y estuve mucho tiempo, pero me encanta formar parte, igual que decíamos antes de la creación del edificio, formar parte de la mejora o del aprendizaje de la persona y luego verla crecer. 

P.-  Bueno, y de algo tan importante como la prevención de riesgos laborales. Al final estás en una parte muy importante que es la seguridad de los trabajadores y trabajadoras de una obra, ¿no? 

R.-  Sí, ha habido una gran evolución en ese aspecto. La gente está muy concienciada, ha habido un gran cambio. También es verdad que la evolución de la técnica ayuda, pero ha habido un cambio en positivo muy importante en ese aspecto. Y cuando das clases ves también el interés y cómo hemos mejorado. 

P.- ¿Cómo está el sector de la construcción, hoy, ahora? ¿Es un sector atractivo, es un sector que ofrece posibilidades, salidas laborales, estabilidad, carrera? Cuéntanos un poco con tu visión de estar dentro del sector, pero además también como docente, qué le podemos ofrecer a la gente. 

R.- Es un sector muy dinámico, con lo cual, si tú tienes esa curiosidad necesaria de investigar un poquito y cuando veas algo que te llama la atención, ponle ganas, ponle esfuerzo, constancia y cuando veas que algo realmente que te motiva mucho, ve a por ello. Al final yo siempre estoy aprendiendo. Mi padre siempre decía que "soy aprendiz de mucho, maestro de nada". Y al final he terminado de maestra porque hay que aprender mucho para poder enseñar. Pero yo siempre estoy curiosa. Siempre estoy pendiente de alguna cosa que no sepa. Pues a ver cómo funciona. A ver esto, esto quiero aprenderlo. Y yo creo que es eso, que no deberíamos abandonar, y menos en el sector de la construcción, que es un sector que evoluciona muy rápido y cada vez más, y creo que todas las personas involucradas en ese sector deberían tener esa curiosidad que despierta el querer aprender todos los días para evolucionar con el sector.

P.- ¿Hacia dónde va este sector? 

R.- No lo sabemos. Yo veo más tecnología implementada, con máquinas mucho más seguras de origen. Veo mucha más formación y también mucho más acompañamiento para las personas que se van a dedicar  a él y eso es muy bueno porque salen más preparadas, más enfocadas y con más herramientas para después hacer un buen trabajo. Está evolucionando tan rápido que yo quiero saber también dónde nos va a llevar a nuevos perfiles. 

P.- Centrándonos ya en las mujeres que nos puedan estar escuchando que digan que el sector no es para mí, es un sector complicado, me da miedo. ¿Qué le podemos para que se atrevan? 

R.- Les diríamos que si ellas sienten esa curiosidad, esas ganas de probar algo, que lo prueben. Si al final no les encaja, que prueben otra cosa. No pasa nada. Yo no decidí ser profesora a los 20 años. Fui pasando por varias etapas y todas me ayudaron a llegar donde estoy ahora y tampoco estoy segura si será mi última etapa o no, nunca se sabe, pero realmente es importante dejarte llevar por tu curiosidad, por tus ganas de aprender cosas nuevas y llegará un momento en que cuando estés haciendo alguna de esas cosas te vas a sentir especialmente bien y te vas a quedar un tiempo o quizás indefinidamente en ese puesto.