Grandes pasos hacia la industrialización del sector: baños a la carta producidos en cadena
Menos costes, mayor calidad y mejoras en eficiencia energética
Fundación Laboral de la Construcción
Cuando entras por primera vez en la fábrica de Conspace (del grupo Vía Célere) situada en la localidad madrileña de Navalcarnero, nada es lo que parece. Por lo que nos cuentan allí producen baños en cadena, exactamente 500 unidades en 2015, y con todo detalle: mampara de cristal, inodoro suspendido, grifería de acero… Al cruzar la puerta, de entrada tenemos que cambiar nuestra percepción de la construcción tradicional para entender lo que se desarrolla en la primera fábrica de baños prefabricados que existe en nuestro país y que incluye la instalación posterior en el edificio.
Hay que dejar a un lado los prejuicios de la palabra ‘prefabricado’. Los baños modulares que fabrica Conspace se realizan con materiales de alta calidad, concretamente con los que elige el propio cliente. Él es quien determina el diseño y todos los materiales de su baño, ‘a la carta’.
También hay que desterrar la idea de los cambios de última hora en la ubicación de algún elemento y los fallos en el funcionamiento. Los baños son fabricados en entornos controlados siguiendo una precisa cadena de montaje. Se estudia cada solución de manera pormenorizada, se ejecutan planos de taller basados en la arquitectura en formato BIM y CAD/CAM, que luego se envían a los equipos robotizados de producción. El error no es posible. El cliente no podrá apreciar si el baño se ha hecho ‘in situ’ o en una fábrica, pero las terminaciones serán precisas y el funcionamiento perfecto. Los controles de calidad son numerosos, se revisan hasta 120 puntos de inspección para que no exista ningún problema de uso y mantenimiento.
Último eslabón de la cadena: el envoltorio
Como si de cualquier artículo de consumo se tratara, el último eslabón de la cadena lo compondría el envoltorio del producto. Y éste es el último paso en la fábrica de Navalcarnero: el baño se precinta en plástico con una máquina embaladora y ya está todo listo para su instalación.
Ésta es una de las características que hacen única a esta empresa pionera en España. “Somos fabricantes e instaladores. Al contar con mano de obra muy especializada, instalamos un módulo en cinco horas de trabajo, y somos capaces de suministrar y dejar en la planta del edificio correspondiente de la obra unas 20 unidades diarias de media”, nos explica Pablo Manuel Gutiérrez, responsable del departamento Técnico Comercial de Conspace. La instalación en obra se realiza con maquinaria especializada, también desarrollada por la propia compañía.
La instalación del módulo se ejecuta tras el proceso de estructura y antes del cierre de la fachada, con lo que la reducción del plazo de la obra es considerable. Se calcula que los plazos de obra se reducen cerca del 20%, lo que supone una bajada en los costes de en torno al 15%.
La mejora de la eficiencia energética
La mejora de la eficiencia energética se aprecia en todo el sistema. Una de las ventajas del producto es la optimización del gasto energético y la efectividad en la gestión de residuos. Controlar el proceso sistemático y cumplir con las garantías de calidad ayuda a conseguir buenas puntuaciones de los sellos de sostenibilidad en el edificio.
La reducción de tiempo, costes y la mejora del medio ambiente no son las únicas ventajas. El trabajador es uno de los mayores beneficiarios del proceso al trabajar en un entorno seguro, con instalaciones acondicionadas que permitirán una reducción del 90% de los accidentes laborales.
Conspace en cifras
La empresa nació en abril de 2014 con el respaldo del grupo Vía Célere y una inversión de 1,8 millones de euros. En la actualidad, cuenta con 30 empleados emplazados en los 3.000m2 de la fábrica de Navalcarnero.
A nivel mundial sólo hay activas una de 140 fábricas de baños industrializados de este tipo, de las cuales, 23 están emplazadas en Reino Unido y 25 en EEUU. La de Conspace es la única en Madrid.
En 2015 Conspace ya ingresó un millón de euros con la fabricación de unas 500 unidades de sistemas modulares, todas en edificación plurifamiliar residencial, concretamente en las promociones de Valdebebas, Arcentales y Embajadores de Vía Célere.
Pero aquí no acaba todo: el próximo mes de mayo coemnzará a comercializar los baños industrializados para rehabilitación, un producto pensado para la reforma parcial de hoteles, residencias, hospitales, y geriátricos, entre otros. Asimismo, ya están trabajando en cocinas prefabricadas y en otras líneas de investigación: “Estamos desarrollando fachadas industrializadas, cabeceros hospitalarios y la mejora de la ergonomía para los operarios. En definitiva, todo aquel edificio con una alta carga en cuartos húmedos”, explica Pablo Manuel Gutiérrez.
Parece que el cambio de Conspace es el camino a seguir hacia una construcción más industrializada y eficiente. El sector de la construcción avanza de la mano de la I+D+i. Materiales, maquinaria, pero también el proceso constructivo, son susceptibles de mejorar y avanzar, para conseguir una construcción más sostenible y de mayor calidad.