Un informe, elaborado por Fedea, advierte de las dificultades de los trabajadores de la construcción para volver al mercado laboral
El estudio incide en que "el sector público tiene que desempeñar un papel de liderazgo en este proceso, pero la participación activa de todas las partes interesadas, incluidos los sindicatos y las patronales, también es indispensable"
Fedea y elaboración propia.
Los trabajadores de la construcción constituyen uno de los colectivos más afectados por la larga recesión económica y de los que generan mayor preocupación por la fuerte incidencia del paro de larga duración. Hasta el 80% de los parados que trabajaban en el año 2007 en la construcción son de larga duración, según las cifras aportadas por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), en el informe "El legado de la crisis: el mercado de trabajo español y las secuelas de la gran recesión", elaborado por los economistas Marcel Jansen y Sergi Jiménez-Martínun.
El estudio advierte de la imperiosa necesidad de combatir las dificultades de los trabajadores del sector para recolocarse y reengancharse al mercado laboral. Enmarcado dentro del programa lanzado J.P. Morgan, "New Skills at Work", cuyo principal investigador es Fedea, este análisis tiene como objetivo principal identificar a los colectivos más vulnerables del mercado laboral -entre los que se encuentra el de la construcción- y reclamar medidas que ayuden a minimizar el riesgo de exclusión social y económica.
Los trabajadores del sector de la construcción han trabajado menos del 50% del tiempo durante la crisis y los que tienen un contrato permanente apenas superan el 25%. Y es que ni la mitad de los ocupados que trabajan en este sector a mediados del 2007 -en concreto, un 46,7%- seguía teniendo empleo al concluir el año 2014, cuando el mercado de trabajo comenzó a dar señales positivas en términos de creación de empleo. En ese momento, del numeroso colectivo de desempleados e inactivos que provenían del ladrillo, prácticamente el 80% llevaba más de un año buscando trabajo. Además, sólo el 37,4% de los que carecía de empleo percibía alguna prestación.
La tasa de personas que llevan más de dos años buscando trabajo -considerados técnicamente “parados de muy larga duración”- rebasa el 17% en el sector de la construcción. Antes de la crisis, el sector representaba un 13,22% del empleo total y en 2015 su participación en el empleo cayó al 6,09%. Esto supone, en números absolutos, que 1,7 millones de trabajadores del sector perdieron su puesto de trabajo.
El informe destaca que los trabajadores de la construcción tienen complicado, además, su reubicación en otros sectores. La mitad del colectivo que tenía trabajo hace poco más de un año aún se mantenía en el sector de la construcción. Mientras, sólo el 9,7% se había recolocado en el sector manufacturero de la energía. Los investigadores vinculan las barreras de estos trabajadores para volver a estar ocupados a su escaso nivel educativo y a que buena parte de ellos carecen también de experiencia laboral en otros ámbitos.
Falta de formación
El trabajo de Fedea denuncia que no hay programas específicos de reciclaje para los trabajadores del sector de la construcción y que los estrictos criterios para acceder a las ayudas para parados de larga duración reducen el alcance de estos programas muy por debajo de los objetivos marcados por el Gobierno. Asimismo, recuerda que el sector de la construcción atrajo en la época de su máximo auge a jóvenes -la mayoría hombres- al mercado laboral, provocando altas tasas de abandono escolar, que hoy en día no tienen las credenciales necesarias para desarrollar una carrera laboral estable.
El nivel de educación es un determinante clave de las perspectivas de futuro de reincorporación al mercado laboral de los desempleados. Los resultados indican que la falta de habilidades y estudios adecuados está incidiendo en la alta tasa de desempleo de larga duración en los trabajadores de la construcción.
Principales conclusiones
Para Marcel Jansen, profesor de la Universidad Autónoma de Madrid, y Sergi Jiménez-Martín, profesor de la Universitat Pompeu Fabra, la prevalencia del desempleo de larga duración junto con las bajas tasas de salida y la escasa eficiencia de los servicios públicos de empleo, generan un considerable riesgo de exclusión social y económica entre los colectivos más vulnerables, entre los que se encuentran trabajadores de la construcción. Según los investigadores, los importantes problemas a los que se enfrentan en el mercado laboral gran parte de los trabajadores vinculados en su día a la construcción provienen de las “debilidades en el diseño y el alcance de los programas de activación para los parados de larga duración”.
Para evitar que estos colectivos pierdan conexión con el mercado de trabajo, España necesita intensificar sus esfuerzos para mejorar sus políticas activas del mercado de trabajo y movilizar todos los recursos disponibles para crear las condiciones necesarias para lograr una recuperación inclusiva que no deje a nadie atrás. El informe también incide en que "el sector público tiene que desempeñar un papel de liderazgo en este proceso, pero la participación activa de todas las partes interesadas, incluidos los sindicatos y las patronales, también es indispensable".
