El estudio Planner-Asprima 2006 examina las estrategias de las inmobiliarias españolas
El Estudio Planner-Asprima se conforma en torno a dos partes diferenciadas. Una parte, dedicada al posicionamiento estratégico de las empresas inmobiliarias españolas, y otra de actualización del Estudio sobre el sector que se llevó a cabo con la primera edición de 2003.
En el capítulo correspondiente a productos inmobiliarios, el análisis pone de manifiesto la disminución paulatina del peso relativo de la primera residencia libre y de la segunda vivienda, frente a otros productos como el alquiler o la vivienda protegida.
En lo que se refiere a mercados geográficos expone el proceso de expansión y diversificación tanto a nivel nacional como en su salida al extranjero. En la expansión internacional se distingue el posicionamiento en mercados occidentales, en los que se busca principalmente negocio patrimonial, y en países emergentes, fundamentalmente Europa del Este, en los que la promoción residencial constituye el principal destino de inversión.
La comercialización constituye una de las áreas estratégicas de las empresas inmobiliarias que mayor transformación está experimentando en los últimos tiempos. Muestra que aunque los clientes siguen situando el precio y la localización como factores decisivos de compra, incorporan factores de calidad del producto y del servicio. En este sentido, la diversificación de los canales de comercialización, el fortalecimiento de la imagen de marca o la prestación de servicios pre y post venta, se configuran como elementos competitivos estratégicos.
Como última área de decisión estratégica se evalúa la política financiera de las inmobiliarias, caracterizada en los últimos años por el fuerte endeudamiento registrado. El estudio apunta la posibilidad de que asistamos a un proceso de concentración en el sector (tanto mediante adquisiciones de empresas como con alianzas), ante la probable limitación de la capacidad de crecimiento interno u orgánico.
El sector inmobiliario español siguió siendo en 2005 uno de los más dinámicos de la UE, apoyado en el segmento residencial que, si bien siguió creciendo, se espera que la reducción de las tasas de crecimiento iniciada en 2004 muestre tasas negativas de evolución en 2006.
El proceso de cambio social y la masiva llegada de inmigrantes mantendrá la demanda de vivienda principal por encima de 400.000 viviendas, pero irá ralentizándose, no sólo por la moderación de entrada de inmigrantes, sino también por las previsiones de ralentización en el crecimiento económico. Esto explicará un menor dinamismo de la demanda de vivienda secundaria nacional, que se verá compensada por la recuperación de otros mercados emisores, lo que aproximará la demanda de viviendas secundarias a las 200.000 anuales.
Fuente: Asprima.